Corta las patatas en cubos grandes. Yo usé 4 patatas medianas (unos 720 g). Lava los muslos de pollo.
Prepara el adobo: vierte 1 dl de aceite en un cuenco, añade 1 cucharadita de pimentón ahumado, 1 cucharadita de ajo en polvo, 1 cucharadita de sal (ajusta al gusto) y pimienta molida. Mezcla bien: con este adobo masajearás los muslos y las patatas.
Vierte el adobo sobre los muslos y las patatas. Deja reposar 30 minutos para que se integren los sabores.
Rocía la cesta de la freidora de aire con aceite y coloca los muslos, pinchándolos a lo largo del hueso.
Distribuye las patatas y los muslos para que quepan bien en la cesta.
Cocina a 160 °C durante 40 minutos. A los 15 minutos abre, remueve las patatas y gira los muslos para que se doren por igual.
Cuando se cumplan los 40 minutos, la carne estará completamente hecha; remueve las patatas un par de veces durante la cocción.
Sube la temperatura a 200 °C y dora todo 2 minutos más. Así quedarán listos tus muslos de pollo con patatas.